Playa Vicente, Ver.- Con lágrimas en los ojos e indignación, fue como despidieron a Bernardo Benite Arroniz, uno de los cinco jóvenes desaparecidos en Tierra Blanca el pasado 11 de Enero y que tras análisis de peritos argentinos, fue como determinaron que los restos que hallaron en el rancho El Limón, se trataba del hijo de Bernardo Benítez y Columba Arroniz.
Ambos destrozados, con fotografías aferradas a su cuerpos, esperando que alguien les diga que no es cierto, que no se trata de sus hijos, que es mentira. Sin embargo la realidad es otra, se trata de su hijo, aquel que esperaron encontrar con vida desde el pasado 11 de Enero cuando fueron levantados junto a otros cuatro jóvenes de Playa Vicente.
En una urna de color café que al interior venía el fémur de Bernardo Benítez fue puesta al interior del templo principal de Playa Vicente, allí cientos de personas arribaron para acompañar a la familia en la misa parroquial.
La indignación y coraje entre quienes acudieron, exigían que continúen las investigaciones, haciendo alusión a que aun faltan cuatro por encontrar.
Quienes estuvieron presentes fueron los padres de Susana, Alfredo, Mario y José, dejando por un momento la Fiscalía de Tierra Blanca para solidarizarse con Don Bernardo y Columba.
Este domingo retornaran a su campamento en la Fiscalía, para continuar en la búsqueda de sus hijos.